En Blog, Consejos, Gatos

HIPERTIROIDISMO FELINO

El hipertiroidismo felino es el trastorno endocrino más común en los gatos de mediana edad (a partir de los 6 años).

El hipertiroidismo es una enfermedad causada por una glándula tiroides hiperactiva que secreta exceso de hormona tiroidea. El exceso de hormona tiroidea provoca un metabolismo hiperactivo que estresa al corazón, al tracto digestivo y muchos otros sistemas de órganos.

Si el veterinario diagnostica a su gato con hipertiroidismo, su gato puede recibir alguna forma de tratamiento para controlar los síntomas clínicos. Muchos gatos a los que se les da un diagnóstico temprano pueden ser tratados exitosamente. Cuando no se trata el hipertiroidismo, los síntomas clínicos avanzarán y llevarán a una pérdida de peso marcada y complicaciones graves debido al daño al corazón, riñones y otros sistemas de órganos del gato.

ETIOLOGÍA

La causa es aún desconocida siendo multifactorial. Los estudios más recientes apuntan que hay factores predisponentes como:

  • La concentración de yodo de la dieta.
  • Consumo de dietas húmedasa base de pescado o hígado debido a la presencia de aditivos alimentarios bociogénicos como Resorcinol, Polifenoles y Bifenoles entre otros.
  • La edad (mayores de 6 años).
img_8380

SINTOMAS CLÍNICOS

Si observa cualquiera de los siguientes comportamientos en su gato, es posible que su gato tenga hipertiroidismo. Coja cita con su veterinario para una detección temprana.

  • pérdida de peso a pesar de tener un apetito normal o mayor
  • aumento de la micción, más orina en la caja de arena
  • aumento de la bebida o sed
  • defecación fuera de la caja de arena
  • aumento de la vocalización
  • inquietud, aumento de actividad
  • vómitos
  • diarrea
  • raramente, letargo y falta de apetito
  • mala condición de la capa del pelo, pelaje descuidado

DIAGNÓSTICO

Es recomendable realizar como mínimo una revisión anual en su clínica veterinaria, si su gato es mayor de 6 años, lo recomendable serían dos chequeos anuales consiguiendo así una detección temprana de esta o cualquier otra patología.

Durante el examen físico, su veterinario puede descubrir el aumento de las frecuencias cardíacas y respiratorias, hipertensión, una glándula tiroides palpable y pérdida de masa muscular. La evaluación de rutina de pruebas de laboratorio y presión sanguínea pueden detectar anormalidades antes de que los síntomas clínicos sean avanzados.

Una prueba de sangre puede revelar el aumento de las hormonas tiroideas para establecer un diagnóstico de hipertiroidismo. De vez en cuando, se pueden necesitar de diagnósticos adicionales para confirmar el diagnóstico. Dado que el hipertiroidismo puede suceder junto con otras condiciones de médicas, y afecta a otros órganos, una evaluación completa del corazón, riñones, y otros sistemas de órganos es fundamental.

TRATAMIENTO

Hay disponibles cuatro tratamientos comunes para el hipertiroidismo felino y cada uno tiene ventajas y desventajas. La elección de la terapia puede depender de factores como la edad del gato, otras condiciones médicas, el costo del tratamiento, disponibilidad de las opciones de tratamiento y la recomendación de su veterinario.

En general, todos los gatos con hipertiroidismo necesitan tratarse. El objetivo de la terapia es restaurar la función tiroidea normal y minimizar los efectos secundarios del tratamiento sin crear niveles más bajo de lo normal de hormonas tiroideas (denominado hipotiroidismo). El monitoreo continuo del gato después de cualquier tratamiento es muy importante, como también chequeos veterinarios de rutina con su veterinario. Si tiene más preguntas, dudas o nota cualquier cambio repentino con su gato, contacte inmediatamente a su veterinario.

 

La clave es siempre la prevención y detección temprana de la enfermedad. El hipertiroidismo felino resulta difícil de prevenir, ya que no se conocen con exactitud las causas que lo originan, como hemos explicado anteriormente. Por ello, ofrecer una alimentación de alta calidad con una cantidad balanceada de yodo, y evitar el abuso de comida enlatada, puede ser beneficioso para nuestro gato. Del mismo modo, es muy recomendable realizar una revisión cada 6 meses, especialmente a partir de los 8 años, para detectar la enfermedad precozmente y tratarla cuanto antes.

shutterstock_1834094695
Otros artículos

Deja un Comentario

*